Llegamos a Kampong Cham hacia las cuatro de la tarde. Nos alojamos en Moon River Guesthouse & Restauran. Cogimos una habitación triple para una noche por 22 €. La ubicación del hostal es muy buena y nos atendieron muy bien. Nos hicieron un desayuno muy rico y alquilamos allí mismo las bicis para ver la ciudad e ir a la isla Koh Paen.
Cuando llegamos al hostal nos dimos una ducha y salimos a dar una vuelta por el paseo del río, donde están los bares, restaurantes y mercado. Había mucho ambiente, la verdad es que se notaba el ambiente navideño mucho más de lo que nos hubiera gustado. El mercado no me pareció nada de otro mundo, pero el ambiente que había en la zona me gustó mucho.
A la mañana siguiente madrugamos para aprovechar el día. Nuestra intención era salir de Kampong Cham después de comer para ya ese día dormir en Siem Reap. Nos levantamos a las 7:00am. Vimos que en el hostal alquilaban bicis, y decidimos coger tres para aprovechar más el tiempo. Al preguntarle a la chica del hostal por la estación de autobuses, nos comentó que ella podría conseguirnos los billetes mientras nosotras desayunábamos. ¡Nos pareció perfecto!
Mientras desayunábamos, la chica nos comentó que en el único autobús que había espacio para tres era en el de las diez de la mañana. Estuvimos mucho tiempo hablando con las chicas del hostal, y las opciones eran irnos esa misma mañana sin ver Koh Paen y Kampong Cham, pasar otra noche en Kampong Cham e irnos en el autobús que salía a primera hora del día siguiente, lo que supondría perder un día del viaje para visitar otros lugares, o quedar a la hora que nosotras quisiéramos con un chofer privado que conocían las chicas del hostal. El chofer privado nos costaba 80$, unos 28$ por persona. El precio del autobús era de 10$. Después de pensar mucho en las posibilidades, decidimos ir esa misma tarde en coche. En este viaje íbamos muy limitadas de tiempo, y decidimos que un día del viaje era más importante que la diferencia de 15€ por persona entre el autobús y el coche.
Después de dejar todo atado, cogimos nuestras bicis y nos fuimos en busca del Koh Paen Bamboo Bridge. Para ir a la isla Koh Paen en la época seca (octubre-abril) se puede cruzar por el puente de bambú, pero en caso de querer visitar la isla en época de lluvia (abril-octubre), habrá que coger el ferry que sale del muelle, puesto que el agua llega a cubrir el puente por completo. El puente está a 2km de la zona de los hostales.
Cruzamos el puente y vimos que las carreteras estaban sin asfaltar, por lo que dejamos las bicis en el quiosco de bebidas que tenían unos camboyanos en la entrada de la isla. Cuando entramos en la isla nos quedamos fascinados. Era una aldea rural de familias que viven en medio de la naturaleza como si el exterior no existiera. Se nota un cambio de maneras de vivir muy grande entre los dos lados del puente. Mientras que en un lado viven del turismo, bares y restaurantes, al otro lado del puente viven de la tierra y de la pesca. Estuvimos alrededor de 2 horas caminando por la isla, y podemos asegurar que esa isla es uno de los lugares más especiales que visitamos en Camboya.
Después de visitar la isla, les dimos 3$ a los del quiosco por cuidarnos las bicis y nos fuimos a ver el Wat Nokor, un pequeño templo budista pre-angkoriano a las afueras de Kampong Cham. Si pasas por Kampong Cham merece la pena una visita.
Para las dos de la tarde volvimos al hostal, cogimos las mochilas, nos montamos en el coche que nos esperaba y salimos rumbo Siem Reap.